Para
la mitología griega, el basilisco era la bestia más peligrosa que haya existido
en la tierra.
Su nombre se deriva del griego βασιλίσκος basilískos:, «pequeño rey»). De
hecho, también es conocido como “Rey de las Serpientes”.
Se
dice que el basilisco nació de un huevo de serpiente que fue incubado por un
gallo y por ello su apariencia es la de un gallo con cola de serpiente; algunos
otros lo describen como una serpiente con cuernos y; por último, también hay
quienes afirman que el basilisco, al nacer de un huevo de serpiente puesto por
un gallo e incubado por un sapo, tiene cabeza de gallo, cuerpo de sapo y cola
de serpiente.
En una noche
de luna llena, si el reloj marcaba exactamente la medianoche, el huevo que algún
gallo viejo pusiera (también puede ser de una gallina ponedora vieja y cansada)
sería el que diera lugar al nacimiento del basilisco. El huevo tendría
características particulares que lo distinguirían de los huevos normales: su
forma sería esférica y de tamaño reducido.
Se le
atribuían muchos poderes, siendo el principal de ellos el poder matar a sus
víctimas con su mirada.
Vivía en el desierto que él mismo creaba; con su mirada era también capaz de romper piedras y quemar el pasto, exhalaba fuego, secaba las plantas y envenenaba las aguas.
Vivía en el desierto que él mismo creaba; con su mirada era también capaz de romper piedras y quemar el pasto, exhalaba fuego, secaba las plantas y envenenaba las aguas.
Aunque pareciera inmortal, hay leyendas que dicen cómo se podía eliminar a un basilisco: Si ve su propia imagen reflejada en un espejo, muere. Otros creen que si se consigue verle antes que él nos vea (muy arriesgado), también muere.
Si
veis Harry Potter y la cámara secreta seguro que algo de esto descubriréis,
pues por ahí aparece un basilisco.
Y dejando atrás la mitología, debéis saber que en realidad ¡sí existen los basiliscos! Mirad este vídeo:
Y dejando atrás la mitología, debéis saber que en realidad ¡sí existen los basiliscos! Mirad este vídeo:
Pero no son para asustarse... Sepamos algo más de ellos:
La velocidad es su principal aliado para capturar las presas (insectos, pequeños roedores o pájaros) y para escapar de los enemigos. Si durante la fuga se encuentran con una corriente de agua, corren por la superficie de ésta gracias a los lóbulos dérmicos de que están provistas sus patas posteriores, lo cual aumenta la superficie de apoyo. También se le llama “lagarto de Jesucristo” por su habilidad para “andar sobre el agua” Sin embargo, al decrecer su velocidad, el basilisco se hunde y tiene que nadar del modo normal de cualquier otro lagarto.
La velocidad es su principal aliado para capturar las presas (insectos, pequeños roedores o pájaros) y para escapar de los enemigos. Si durante la fuga se encuentran con una corriente de agua, corren por la superficie de ésta gracias a los lóbulos dérmicos de que están provistas sus patas posteriores, lo cual aumenta la superficie de apoyo. También se le llama “lagarto de Jesucristo” por su habilidad para “andar sobre el agua” Sin embargo, al decrecer su velocidad, el basilisco se hunde y tiene que nadar del modo normal de cualquier otro lagarto.
Se suele
decir de alguien que cuando se enfada mucho y se ve enfurecido “se pone hecho un basilisco”. Imaginad
por qué...
Así que cuando os enfadéis, miraos rápidamente al espejo. No os pasará como a los basiliscos, ¡pero descubriréis cuán feos estáis enfadados!
Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Basilisco_(criatura_mitol%C3%B3gica)
Así que cuando os enfadéis, miraos rápidamente al espejo. No os pasará como a los basiliscos, ¡pero descubriréis cuán feos estáis enfadados!
Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Basilisco_(criatura_mitol%C3%B3gica)
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| Investigadores: Rubén y Saúl. Cuartohociqueros |
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